A 42 km. de Pamplona se encuentra Olite, una villa medieval de origen romano, situada a orillas del río Cidacos, en Navarra.
La gastronomía de Olite, no deja indiferente a los turistas. La fina y exquisita repostería y los buenos vinos, hacen la delicia de todos los paladares.
Entre los atractivos monumentales de Olite, tenemos que mencionar:
Palacio Viejo: también conocido como el Palacio de los Teobaldos, se trata de un castillo defensivo, hoy convertido en Parador de Turismo y que forma parte del conjunto edilicio del Palacio de los Reyes de Navarra.
Palacio de los Reyes de Navarra: construcción cortesana de carácter residencial, ha través de los años, ha pasado por numerosas restauraciones, con lo cual no tiene un estilo arquitectónico definido, sino es más bien una mezcla de estilos, lo que lo hace aún más interesante.
Iglesia Santa María de la Real: iglesia gótica del siglo XV, del edificio destaca su portada y su retablo renacentista.
Ciudad declarada Conjunto Histórico y Artístico, Olite es una de esas villas en las cuales uno se puede pasar horas recorriendo lugares históricos y sus calles estrechas y típicamente medievales, sin aburrirse, por todo esto, es un destino perfecto para ir de escapada romántica.
